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Humo blanco
Con mucho frío o temprano en la mañana, es normal que al hacer andar el motor –independiente si usa gasolina o diésel-, se condense y evapore el agua al interior del motor, evacuando humo de color blanco por el escape.
Si el humo blanco es espeso y sigue saliendo con el motor caliente, es claro que hay problemas en el sistema de refrigeración o problemas en el sistema de inyección diésel.
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Humo azul
El humo azul se caracteriza por tener un fuerte olor a aceite tostado o quemado. Esto sucede por que puede estar entrando aceite a la cámara de combustión. Algunas probables causas de esta falla pueden ser la antigüedad del motor, el uso de un aceite malo, fallas en los pistones o válvulas.
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Humo negro
Este tipo de desperfecto no es común en los motores modernos con inyección y catalizador. Este defecto se produce por un exceso de combustible en la mezcla de aire y combustible que hace funcionar el motor. A veces sucede por el exceso de hollín en el filtro de aire.
En el caso de los diésel, el humo de este color puede ser relativamente común al acelerar a fondo debido al exceso de carburante, falta de oxígeno o mala pulverización de los inyectores. Algunos mecánicos de baja reputación suelen eliminar el filtro DPF en vez de cambiarlo o limpiarlo, lo que deja los vehículos fuera de regla, más contaminantes y evacuando humo negro en exceso.